La alarma salta hace diez días. Entonces, tras una inspección ordinaria de la Comunidad de Madrid, los técnicos deciden precintar la consulta médica, la de fisioterapia y el gimnasio. Esta semana, tras dos inspecciones, han decidido cerrar el centro. Hablan de medicamentos con la cadena de frío rota, de riesgo de incendio o de fugas de agua sin arreglar.
Enlace a la noticia: «Obligan a cerrar una residencia en Madrid con internos en estado deplorable: ‘A mi abuela le han tenido que amputar la pierna’» – La Sexta – 10/07/2019